Ahorrar recursos

Lo que nos importa es utilizar energía, no derrocharla. Sin embargo, el ahorro de energía no debe ir en detrimento de la calidad en la empresa. Con el fin de mantener la competitividad, los procesos de gestión optimizados y eficientes son el factor clave para el éxito de la empresa. Casi todas las empresas poseen un potencial desaprovechado que mediante optimización permite un gran ahorro de energía. En principio, se debe aprovechar dicho potencial, porque este efecto de ahorro frecuentemente se puede realizar sin inversiones y con un despliegue reducido. Sólo a partir de este momento, se deberían continuar optimizando los procesos de gestión, los procedimientos y los desarrollos mediante inversiones en equipamiento técnico. Un análisis de costos-beneficios le brinda al empresario claridad y seguridad en relación con la rentabilidad de su inversión.
os-beneficios de la inversión en equipamiento técnico.

A pesar de la similitud de los tipos de ropa y de las técnicas de lavado, las condiciones de servicio individuales en las lavanderías difieren notablemente. En particular, cuando se trata de optimizar de forma efectiva es necesario considerar individualmente las circunstancias de cada caso. Por ese motivo, en el marco de nuestro Servicio Técnico ofrecemos también asesoramiento especializado en materia de gestión de energía. Aquí nuestra gestión de energía considera la empresa en su totalidad y armoniza todas las medidas de forma razonable.

Paso 1

En primer lugar verificamos de qué manera se podría incrementar el rendimiento y reducir el despliegue, mejorando los procesos y los desarrollos.

Paso 2

El paso siguiente es la optimización del proceso de lavado teniendo en cuenta el lote y la ocupación de las máquinas.

Medidas sencillas para el ahorro de energía en los pasos 1 y 2

Antes de considerar la posibilidad del empleo de aparatos para la recuperación de calor del líquido de lavado y de las aguas residuales, en principio se debería asegurar que hayan sido implementadas las siguientes medidas simples para la gestión de energía:

• Aislar los conductos de vapor y condensado y las máquinas.
• La temperatura de la ropa no debe exceder 65°C.
• Reunir diferentes lotes de ropa similares en determinadas máquinas a fin de evitar, en lo posible, el cambio de lotes.
• Cargar siempre las máquinas completamente.
• Planificar el llenado de las lavadoras teniendo en cuenta la ocupación uniforme de los dispositivos de acabado empleados a continuación.
• Desconectar la calefacción de los dispositivos de acabado que no se encuentren en uso. Evitar poner en marcha repetidamente los dispositivos de acabado durante un mismo día.

Paso 3

A continuación se determina el contenido aprovechable de calores residuales y las corrientes de agua según lugar, tipo, volumen y producción, analizándose luego las posibilidades de su recuperación razonable y de su conducción hacia los sitios de demanda. Una vez que se disponga de dichos datos es posible determinar el despliegue necesario para la utilización del calor residual y la recuperación de agua. Una inversión en aparatos para la recuperación de agua y de calor y su instalación e integración en el desarrollo de gestión de la empresa, vale la pena si los ahorros seguros permiten una amortización de dichas inversiones en el transcurso de tres a cuatro años.

No existe una solución ideal sencilla y es importante observar el desarrollo de gestión en su totalidad. Las medidas individuales deben entrelazarse y estar armonizadas entre sí. No tiene ningún sentido recuperar energía con un gran despliegue técnico si después no es posible utilizarla de forma razonable. En el proceso de lavado sólo se utiliza aprox. 1/3 de la energía, otros 2/3 de la energía hacen falta en la lavandería durante el secado y el acabado.

Para poder aplicar en beneficio de los clientes de forma competente y eficiente el amplio know-how del cual disponemos, en cooperación con nuestros asociados acreditados y eficientes ofrecemos soluciones individuales armonizadas exactamente a las condiciones de cada empresa.

En Larosé en Nonnweiler, en cooperación con el cliente y con Kannegießer hemos implementado un nuevo concepto energético. De esta manera ha sido posible reducir tanto el consumo de agua de toda la empresa de 11 l/kg a 6,5 l/kg como el consumo de energía, el cual ya se encontraba en un nivel bastante bajo, de 1,3 kWh a un promedio de 0,8 kWh / kg de textiles. También para una gran empresa de lavandería estos valores resultan capaces de superar un récord.

Cualquier lavandería interesada gustosamente puede contactarnos a través de nuestro servicio exterior o bien directamente, con el fin de visitar empresas de lavandería de nuestros clientes previa concertación de una cita o para convenir citas para pruebas de lavado en su propia empresa.
¡No duden en ser exigentes con nosotros! Nos causaría mucho placer poder saludarles como clientes satisfechos.